Carta de octubre 2014

Pére Jacinto Farias

SABER LEER LOS SIGNOS DE LOS TIEMPOS…

Jesús, en cierto pasaje del Evangelio, critica a los hombres de su tiempo por no ser capaces de leer en los acontecimientos los signos de la presencia de Dios en la historia (Lc 12,54-59). El Concilio Vaticano II, en la Constitución pastoral sobre la Iglesia en el mundo contemporáneo, habla también de los signos de los tiempos y de la necesidad de una lectura « teológica » de la historia (GS 4). Dios no habla a las personas directamente, sino a través de los acontecimientos de la historia y de la vida de cada hombre, no necesariamente de los grandes acontecinmientos, extraordinarios en su realización y en sus consecuencias, sino sobretodo a través de las pequeñas cosas de las que está hecha la vida de cada uno de nosotros.

En el reciente Colegio Internacional de los Equipos de Nuestra Señora, en Medway, cerca de Boston, en los Estados Unidos, tuvimos como texto inspirador la visita de Jesús a la casa de Marta y María (Lc 10,38-42). Las dos hermanas acogieron al Señor, ocupándose Marta de las tareas domésticas y María haciendo compañía a Jesús, sentada a sus pies, escuchando su Palabra. En un momento dado, Marta le pide a Jesús que le diga a su hermana que le ayude. La respuesta de Jesús es, como siempre, sorprendente : Marta, Marta, andas ocupada con tantas cosas, pero una solo es necesaria. Y María ha elegido la mejor parte.

¿Cuál es esa mejor parte que María ha elegido y que no le será quitada ? Estar a los pies de Jesús y escuchar su Palabra. Las dos hermanas nos representan a todos nosotros, son una imagen de la Iglesia: la Iglesia de hoy en medio de tantas pruebas, y cada uno de nosotros, individualmente y como matrimonio, debemos ocuparnos de una gran variedad de tareas y de muchos problemas. La pareja y la familia deben ser un lugar que acoge al Señor, donde se escucha su Palabra, para que no nos dispersemos con cosas secundarias, pero al mismo tiempo ocupándonos de ellas, sin perder de vista lo que es verdaderamente esencial.

El Papa Francisco ha convocado a los obispos para un sínodo especial sobre la familia hoy. Es el desafío de leer los signos de los tiempos en lo que concierne a la situación de las parejas y de las familias en la Iglesia y en el mundo. Son muchos los signos negativos, contrarios, que atentan contra la dignidad del matrimonio y de la familia, según el principio y según el « pensamiento de Dios » sobre el matrimonio y la familia. Es necesario que cada uno de nosotros, en pareja y en familia, escuchemos el Evangelio sobre la familia, como María, a los pies de Jesús.

Queridisimos matrimonios, no tengáis miedo de poneros en sintonía con el sentir de la Iglesia en este tiempo tan complejo y problemático que estamos viviendo, en el que necesitamos verdaderamente escuchar la palabra del Señor como María, y estar dispuestos a trabajar en favor del matrimonio y de la familia cristiana en el mundo, la célula esencial de la Iglesia y de la sociedad. Sed valientemente fieles a la mística de nuestro Movimiento, un don y un carisma que el Señor dio a la Iglesia y que es tan necesario y actual como en los tiempos de su origen : busquemos juntos, como al principio, los caminos de fidelidad al Evangelio y a la Iglesia para que todos, Consiliarios Espirituales y matrimonios podamos, caminar hacia la santidad, porque por ahí pasa «lo único necesario »,  la mejor parte que jamás nos será quitada.

P. José Jacinto Ferreira de Farias, scj


Clausura de la Investigación en la Causa del Padre Henri Caffarel